miércoles, 28 de febrero de 2018

Píldoras gramaticales I. Aún y aun.

Últimamente he estado leyendo mucho, tanto novelas ya publicadas como algunas que están por venir (y ojito a lo que viene), y siempre encuentro alguna errata que se escapa de las manos hasta del corrector más veterano y cuidadoso. 

La lengua española esconde algunos entresijos complicados de comprender y de aprehender al dedillo, y en ocasiones nos juegan malas pasadas que afean nuestros textos. Para evitarlo, voy a intentar ofrecer unas pequeñas Píldoras gramaticales que ayuden a, en primer lugar, comprender y disfrutar nuestra lengua y, en segundo, a pulir nuestros textos. 

Podría haber elegido casi cualquier tema para la primera Píldora, pero he optado por la diferencia entre aún (con tilde) y aun (sin tilde) porque es la falta de ortografía (en este caso, de acentuación) más habitual con la que me he encontrado en los textos. 
  • A modo de inciso, siempre utilizo el DRAE (Diccionario de la Real Academia Española de la lengua) para buscar las acepciones de una palabra. Cuando tengáis dudas sobre su uso, especialmente gramaticales, os recomiendo utilizar el Diccionario Panhispánico de Dudas, donde aparecen explicados al detalle los usos correctos e incorrectos de algunos elementos complicados del español. En nuestro caso, aún/aun no se incluye. 

El tema en el que se incluye la diferencia entre aún y aun es la tilde diacrítica. Se trata de una tilde que permite diferenciar entre palabras que se escriben igual (mí/mi, te/té...) según sus usos. 


Como se aprecia en la imagen, únicamente se escriben con tilde (o acento gráfico) las tres primeras acepciones de la palabra, mientras que las dos segundas (y la locución conjuntiva concesiva y algo más que veremos) no la llevan. 

Una forma sencilla de saber si nuestro ejemplo lleva tilde es ver si lo podemos sustituir por "todavía", pues el significado de aún en las tres primeras acepciones es equivalente al de este adverbio. 

En el primer caso, aún tiene un significado puramente temporal. Ej.: Aún es de día. Aún no han llamado. Aún no ha hecho la comida. Con nuestro truco, podríamos decir: Todavía es de día. Todavía no han llamado. Todavía no ha hecho la comida.

En el segundo, aún se emplea con el significado de "no obstante, sin embargo". Aquí también se puede sustituir por todavía, en el mismo sentido. Ej.: Fue el ganador y aún se quejó. Lo despertaron el primero y aún llegó tarde. Fue el ganador y todavía se quejó. Lo despertaron el primero y todavía llegó tarde. En este caso hay que tener cierto cuidado, porque se escribe aún con tilde cuando va solo. Después veremos las locuciones (unión de aun con otros elementos) y os explicaré que la locución concesiva "aun así" no lleva tilde. Entonces, Fue el ganador y, aun así, se quejó. Por lo tanto, cuidado. Debo decir que este uso concreto de aún con tilde con significado de sin embargo lo he encontrado utilizado muy pocas veces. 

La tercera acepción de aún, como dice el diccionario, denota encarecimiento o ponderación. Es decir, se utiliza cuando queremos contabilizar algo. Y para que nos quede más claro, habitualmente va unido a los adverbios más/menos (bien inmediatamente antes o después o bien unidos a un sustantivo o adjetivo relacionado). Ej.: Le dieron quince barras, pero quería más aún (quería más todavía). Deseaba más reconocimiento aún del que le habían concedido (más reconocimiento todavía). Pensó que sería caro, pero costaba menos aún de lo que había pensado (costaba menos todavía).  

Estos son los tres únicos usos de aún que llevan tilde. 

La cuarta acepción de aun (sin tilde) lo hace equivalente a "hasta/incluso", e indica algún tipo de límite. Para mí, los dos ejemplos que proporciona el DRAE tienen matices bastante diferentes. Os explicaré cómo distinguirlos: 
- Te daré 100 dólares, y aun 200, si los necesitas (> e incluso 200). Implica un límite y poner todavía sonaría raro, por lo que nuestro primer truco hace aguas. Si no lo podéis intercambiar por todavía, no pongáis tilde. 
- Aun (estando) casados, dormían en habitaciones separadas (Incluso estando casados...). Se puede sustituir, como dice el DRAE, por incluso, por lo que sin tilde. Peeeero...
Este último caso creo que tiene un matiz diferente, como os decía. Podríamos sustituirlo por "A pesar de que estaban casados" o "Aunque estaban casados", con un valor en cierto modo concesivo. En el ejemplo que nos da el DRAE he puesto el gerundio entre paréntesis porque puede no aparecer, pero se trata de una construcción muy frecuente. 
Más ejemplos: Aun sabiéndolo, decidió no actuar. Aun siendo consciente de las consecuencias, salió pasadas las doce. Se ve muy claro que no podemos decir *Todavía sabiéndolo o *Todavía siendo consciente, pero sí "A pesar de saberlo" (por cuestiones gramaticales, cambia el gerundio por el infinitivo) o "Aunque lo sabía" (en este caso, cambia por una oración con verbo conjugado). 

La última acepción aun va sin tilde cuando tiene un significado equivalente a "siquiera" (habitualmente, "ni siquiera" unido) o a "tan solo". Ej.: Ni aun sabiéndolo quiso contarlo. Ni siquiera sabiéndolo quiso contarlo. Tampoco aquí podemos sustituirlo por "todavía" (*Todavía sabiéndolo). 


Fuera de estas cinco acepciones, que son los significados y usos básicos de aún/aun, hay ciertos grupos de palabras que suelen ir unidos (locuciones) y que tenemos que conocer.

El primero nos lo da el DRAE: aun cuando (sin tilde), equivalente a una oración subordinada concesiva que empieza por aunque. Si lo podemos sustituir por una oración completa que empiece por aunque (al igual que la acepción 4), irá sin tilde. 
Ej.: Aun cuando le habían advertido, decidió ir por su cuenta. No eligió la primera puerta, aun cuando todas las señales le indicaban el camino correcto. (Aunque le habían advertido..., ...aunque todas las señales...).

El segundo os lo voy a dar yo porque es un uso frecuentísimo y más frecuentísimos aún (acepción 3) son los errores que encontramos en su uso: aun así. Siempre va sin tilde. No podemos decir *todavía así, mientras que nos aceptará bien la sustitución por una oración que empiece por aunque (o, incluso, por "a pesar de ello"). 

Ej.: Quiso terminar antes de comer. Aun así, no se esforzó todo lo que debía. (A pesar de ello, no se...).
Ej.2: Y, aun así, el predicador siguió andando. (Y, aunque estaba así/ a pesar de estar así).   

Como veis, los trucos se pueden resumir esencialmente en dos: si se puede sustituir por "todavía" (más temporal), lleva tilde. Si lo podéis sustituir por una oración de "aunque/a pesar de" (más concesiva), no la lleva. 

Mucho ojo al escribir y buenas letras. 

S.


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